La escritura ha supuesto para ella una vía de escape por una herida aún abierta. Unas letras que han logrado el reconocimiento de la Federación Asturiana de Concejos. Carmen Alonso, colaboradora habitual de El Faro, ha ganado el II Concurso de Relatos «No me llames soledad» con «Añoranzas», un relato a su hija fallecida, Bárbara García Alonso.
El fallo del jurado tuvo lugar el 17 de mayo. Además de la vecina de Antromero fueron premiadas con una mención especial Matilde Suárez Suárez (Coaña), María Dolores Palacios Sánchez (Langreo) y Blanca Iglesias Manjón (Proaza). La entrega de premios será a finales de junio con «agradables sorpresas para participantes y sus acompañantes».
«Añoranzas» es fruto del momento en el que Carmen Alonso tenía los sentimientos a flor de piel, pocas horas después de decir adiós a su hija. «Empezó a salir todo por mi mente y salió el relato de mis sensaciones con ella y de los juegos que hacíamos», explica.
Aunque tiene «un puntito de ficción», hay mucho de realidad. Recoge el juego que madre e hija solían hacer hace años y que luego la escritora de Antromero ha reproducido con sus nietos. En los días de viento, mandaban «papelitos» al cielo con mensajes para la gente que ya no está. Eran momentos de especial intimidad familiar, en la que ambas hablaban y expresaban sus sentimientos. «Ella siempre me decía: «Madre, cuando tú ya no estés, el viento será nuestro punto de conexión»», contiene el relato.
« Empezó a salir todo lo que tenía por mi mente, las sensaciones que viví con ella.»
Aún no es capaz de expresar lo que supone para ella esta premio. Emocionada, traslada la lectura positiva de su otro hijo porque Carmen se encuentra en una fase de asimilación. «»Mamá, no hay mejor homenaje a Bárbara», me dijo», recuerda. Las letras van dirigidas al cielo y también a «todas esas madres que están en esta situación».
Este es un artículo que fue publicado originalmente en El Faro de Junio 2023.